La música rap es desde hace tiempo un convincente estilo de arte, gracias, en partes iguales, al poderoso ritmo de los DJs y productores y al valor poético que le inculca el maestro de ceremonias. Desde los más de 30 años que lleva existiendo el rap, la oratoria que muchos emcees han puesto en sus trabajos han cautivado a millones de oyentes por todo el mundo. Igual de fascinantes que esas historias que ellos mismos crean, son las propias vidas de los emcees. Por ejemplo, los orígenes de Tupac Amaru Shakur quedaran siempre grabados en la memoria del Hip Hop: su nombre hace referencia al libertador peruano Túpac Amaru II, descendiente de miembros de el Black Panther Party y educado en artes escénicas en los EE.UU, a donde migró su familia. William Michael Griffin, más bien conocido como Rakim, descendiente de una familia de músicos y criado bajo la influencia de leyendas del jazz como John Coltrane o Thelonious Monk. Se formó como saxofonista y supo trasvasar la síncopa y el timing del jazz a su flow. A pesar de que han existido muchos MCs que nos han fascinado, de tantos lugares tan dispares, tal vez ninguno de ellos tenga una biografía más interesante que la de aquel laureado poeta de Boston, aquel que adornó el Hip Hop con su presencia durante casi un cuarto de siglo y que nos dejó en la primavera de 2010, demasiado pronto: Keith Edward Elam, siempre conocido como «Guru».
Keith Elam: Genesis.
Con el rap reconocido como un arte eminentemente callejero, se ha vuelto habitual oír hablar sobre los descastados inicios de muchos raperos. Desde expulsiones del instituto hasta venta de drogas para ganarse la vida. Muchos raperos han crecido en terrenos difíciles zonas en las cuales el rap es la única escapatoria por ende es que busca su lugar en la escena. La historia de Guru comienza en un marginal barrio de Boston, el Roxbury, aquí fue donde Keith Elam, el tercer hijo de los cuatro que tenían Harry y Barbara Elam, nació un 17 de Julio de 1961. Aunque el clan Elam vivía en una zona áspera, fue por elección y no por obligación. Los Elam eran una familia acomodada, encabezada por Harry Elam; Presidente del Tribunal Supremo de la Corte Municipal de Boston y Juez Asociado de la Corte Superior de Massachusetts y Barbara Elam, codirectora de la Library Studies para el sistema de escuelas públicas de Boston y profesora de literatura infantil. Los Elam, todo un ejemplo de excelencia académica para sus hijos, creían en el resurgir de su barrio, por eso no decidieron buscar pastos más verdes, aún estando bien posicionados para hacerlo.
Mientras Harry Jr. y Patricia (su hermana) trazaban un magistral camino en sus vidas, el joven Keith daba muestras de ser un adolescente muy dotado pero renegado por las circunstancias en las que se encontraba. A menudo se enfrentaba a sus compañeros blancos de clase, que le tenían marginado, a él y a un reducido grupo de estudiantes negros, todos sabían que Keith valía más que lo que habían valido ellos. A medida que Keith iba creciendo, iba desarrollando cierta afinidad por el jazz, a través de su abuelo Edward Clark y su padrino George Johnson; pero también tenía un círculo de amistades en los que se incluían algunos traficantes de drogas de los que se había hecho amigo cuando era adolescente. Esos mismos traficantes descubrieron un nuevo fenómeno para Keith: el rap. Los camellos volvían de sus rutinas en New York con nuevos mixtapes que traían a Beantown para escucharlos en el barrio. En 1979, Keith se graduó y se dirigió al sur de Atlanta (Georgia) para especializarse en administración de empresas en la Morehouse College. Aquí, en Atlanta, fue donde el hombre que el mundo llegó a conocer como Guru comenzó a tomar forma. En Morehouse, Keith expandiría su visión del mundo gracias al Dr. Lawrence Carter, un profesor que le enseñó a Keith sobre las diferentes religiones y las barreras, construidas por los propios hombres, entre las diferentes razas. Keith, inspirado por aquellas cintas que su círculo más oscuro traía de New York, sacó su bolígrafo y, entre clase y clase, comenzó a rimar y a arrollar en competiciones por toda Atlanta bajo su alias MC Keithy E. En 1982, poco después de graduarse, Keith comenzó a vender maquetas y a sentar las bases de su carrera discográfica. Después de obtener su licenciatura y abandonando Morehouse (1983), Keithy E conectó con algunos de sus colegas de Boston: los MCs Big Shug y Damo D-Ski y el DJ 1 2 B Down y juntos formaron un grupo llamado GangStarr Posse. Pero Keithy E se dio cuenta de que crear algo de Rap en Boston no le daría para mucho, así que a mediados de los ’80 decidió mudarse a New York, la meca del Hip Hop, donde inicia todo, la esencia del clásico al que tanto amaba.
Cuando MC Keithy E llegó a New York tuvo que buscarse la vida solo, su DJ y máximo valedor en GangStarr Posse, Big Shug, fue encarcelado y los otros dos no creyeron que dar el salto a la Gran Manzana fuera un paso necesario. Keithy E se reinventó bajo el sobrenombre de «Guru», un nombre basado, en gran medida, a las filosofías inculcadas por el Dr. Lawrence Carter en Morehouse y que a la vez era el acrónimo de «Gifted Unlimited Rhymes Universal». Después de llegar a Gotham, Guru se graduó en la Fashion Institute of Technology, un instituto de arte y diseño ubicado en Manhattan. Tal y como hizo en Morehouse, Guru no paró de tocar las puertas de las discográficas y estudios buscando soltar sus demos o actuar en actos o centros locales. Alcanzar el sueño de convertirse en un afamado rapero no era compatible con la carrera que cursaba de diseño y arte, así que Keith decidió abandonarla, cosa que no sentó nada bien en su familia, porque veían las aspiraciones del joven Keith como algo irreal.
Los primeros años de Guru en New York fueron difíciles, entre Queens, el Bronx y Harlem, comenzaría a formarse una leyenda. Estuvo trabajando de albañil, en una oficina de correos de Manhattan, y como no, lanzando más y más demos. Lo aburrido de su trabajo lo suavizaba con su walkman, a través del cual podía sumergirse en sus canciones favoritas mientras cruzaba de un lado a otro New York. Guru encontró consuelo en su casa de acogida de Brooklyn, viviendo entre Bedford-Stuyvesant y East New York, cerca de un pilar del rap nada mas y nada menos que el gran Big Daddy Kane (Lewis Avenue), siguió promocionando sus demos por el centro de Brooklyn, en el ya desaparecido centro comercial de Albee Square. En 1987 los esfuerzos sobre humanos realizados obtuvieron su recompensa cuando firmó un contrato con Wild Pitch Records, una novata discográfica con base en Manhatan. Guru, podríamos decir, se jugó la vida por alcanzar sus sueños, y justo ahora se le apareció el rayo de luz, pero, por suerte para Guru, las estrellas no estaban más que alineándose, pues nunca se imaginó que iba a encontrar un socio musical tan brillante como él y juntos, hacer historia en el Hip Hop (Ya ustedes han de saber de quien hablo). Cuando Guru firmó por Wild Pitch, parecía que por fin había alcanzado tan ansiada meta. Comenzó a asumir roles en la mesa de mezclas, producción y grabación; fue emparejado con DJ Mark the 45 King, un DJ nativo de Irvington (New Jersey), que además de dirigir varias sesiones de grabación de Guru, le ayudó a pulir sus técnicas de producción. Además de ser uno de los fichajes de Wild Pitch, se convirtió en A&R no oficial de la discográfica, examinando todas las maquetas que llegaban a las oficinas. A finales de 1987 Gurú se encontró con la demo de un grupo que se hacía llamar Posse Inner Circle, mientras examinaba las habilidades de los tres MCs, a Guru le fascinó la calidad instrumental del grupo, así que le imploró a Stuart Fine, presidente de Wild Pitch, que contactara con los chicos para conocer al productor del grupo. Fine contactó con Christopher Martin, nativo de Houston y de 21 años de edad, conocido como Waxmaster C y que servía como DJ y productor para Inner Circle Posse. Cuando Martin comenzó las vacaciones (cursaba en la Prairie View A & M University, en Texas) en el parón semestral, decidió viajar a Brooklyn a visitar a algunos familiares, allí volvió a las oficinas de Wild Pitch y se reencontró con Stu Fine y Guru, acto seguido, estos dos artesanos del rap trabajarían exclusivamente juntos. En cuanto al sobrenombre de Waxmaster C, Stu Fine le preguntó si para esta nueva etapa iba a seguir con él, Waxmaster C indeciso decidió consultarle a su madre y esta le dijo que se pusiera Premier, porque ella siempre quiso que fuera el mejor en cualquiera de sus aspiraciones, así fue como surgió DJ Premier. Ambos formaron un colectivo, The GangStarr Posse, que no dio muchos frutos, así, se rebautizaron como GangStarr. El nuevo dúo exprimió al máximo el estudio de grabación para lanzar su álbum debut en el verano del ’89, lanzaron No More Mr. Nice Guy, el primero de una serie de grandes álbumes.
A mediados de los ’90, Elam se había transformado en Guru, líder y fundador de uno de los grupos más respetados del Hip Hop. En DJ Premier, Guru había encontrado un alma gemela que también partía del jazz, que tenía un oído superdotado para los beats, breaks y melodías y que tenía una destreza envidiable en los platos esto le llevaría a ser hoy en día la figura mas representativa en el mundo del Hip Hop. El camino de este dúo no estuvo exento de baches, comenzando por su salida de Wild Pitch Records. A finales de los ’80 y a principios de los ’90, mientras los singles de No More Mr. Nice Guy sonaban en los programas de radio y video de los EE.UU., Guru todavía seguía con sus rutinas: seguía apoyando y aconsejando a los más pequeños con su labor en las casas de acogida y seguía cogiendo el metro para llegar a su trabajo… Pero se sentía humillado por Wild Pitch, primero por la presión de no vender los suficientes discos y segundo por la poca promoción que hacían de su grupo, es por esto por lo que en 1990 Guru hizo lo necesario: ficho por Chrysalis Records, una discográfica Pop-Rock.
Aunque Wild Pitch no se tomara en serio la promoción de Gang Starr, la magia del dúo no pasaría desapercibida. La dedicación por parte de Guru y Premo, junto con su amor por el jazz, tomaría relevancia en los medios a principios de 1990 cuando Spike Lee, el afamado cineasta de Brooklyn, se hizo un ferviente fan del grupo. Por aquel entonces, el director se encontraba trabajando en «Mo’ Better Blues», película que escribió, produjo y dirigió él mismo para lanzarla el verano de ese año. Lee quedó encantado con el tema «Jazz Music», del álbum debut del dúo. Tanto fue así que, buscando algo similar para su película, fue en busca de Guru y Premier para pedirles que contribuyeran con un corte en la banda sonora de la película. Lee conectó a Gang Starr con Branford Marsalis, un renombrado saxofonista y director de orquesta, que con su equipo, el Branford Marsalis Quartet, llevaría a cabo la mayor parte de los cortes de la banda sonora. Al igual que con DJ Premier, Branford Marsalis simpatizó rápidamente con Guru, los tres eran forasteros en Brooklyn y no compartían el desprecio que algunos contemporáneos del jazz le tenían al rap (La vaga idea de que el Rap es Drogas y Sexo). El vínculo con Marsalis desembocó en la creación de «Jazz Thing», en el que Premier se consagró como DJ, perfectamente secundado por Robert Hust y Kenny Kirkland, ambos miembros de la Branford Marsalis Quartet. Pero Guru, que sabía de que iba el jazz gracias a su abuelo y su padrino, era la estrella, aquel mismo que iba a la deriva por el espacio y por el tiempo, cruzando continentes y saludando a estrellas del jazz como Dizzy Gillespie, Max Roach, Charlie Parker, Ornette Coleman, etc. Las dotes oratorias de Guru brillaban como estrella: su cristalina voz monótona, su compás cuidadosamente medido y su conocimiento académico sobre el tema. Cuando «Jazz Thing» sonó en los créditos de la película «Mo’ Better Blues», Gang Starr fue formalmente presentado a todos los espectadores, que rápidamente comenzaron a interesarse y comprar su música. Vendieron cientos de miles de copias de sus discos comenzando con Step in the Arena, el segundo LP del dúo y el primero con Chrysalis Records.
Mientras la década de los ’90 pasaba, Gang Starr se convirtió en el faro de la coherencia en el mundo del rap. Aunque ambos no eran nativos de NY, Guru y DJ Premier llegaron a encarnar el auténtico sonido neoyorquino en la escena del Hip Hop y eran considerados los verdaderos embajadores de esta escuela en la Gran Manzana. En medio de su tercer (Daily Operation, 1992) y cuarto (Hard to Earn, 1994) álbum, Guru fue sentando las bases para su próxima encarnación: una inconformista distorsión de géneros musicales gracias a su trabajo en Heavy Rhyme Experience Vol. 1 (1992), un álbum experimental de la banda británica de acid jazz Brand New Heavies. Heavy Rhyme Experience…, un ambicioso proyecto que unía la instrumentación en vivo del jazz con el ingenio lírico del rap. Guru fue uno de los variados y venerados emcees que participaron en el proyecto, en su caso, colaboró en el tema «It’s Getting Hectic». Las sesiones con los Heavies, su aprecio por el jazz y la frecuencia con la que se incluía el jazz en las producciones de rap lo llevó a crear Jazzmatazz, un proyecto de fusión en el que combina los elementos más distintivos del jazz y del rap. Este proyecto se llevó a cabo gracias a la riqueza que le proporcionaron los diversos artistas, como Branford Marsalis o N’Dea Davenport (vocalista de Brand New Heavies), con los que se fue encontrando en sus inicios en Gang Starr. Como testimonio de la veneración que se había ganado entre sus compañeros de profesión, Guru fue capaz de reunir una ecléctica lista de colaboradores, entre los que se incluyen leyendas como Donald Byrd, Roy Ayers, Lonnie Liston Smith, el cantante de southern jazz Carlee Anderson o nuevos talentos como Simon Law (de la banda británica Soul II Soul), Courtney Pine, Ronny Jordan (ambos de la nueva escuela de jazz británica) o el rapero francés MC Solaar. El álbum parecía una mezcla perfecta de breakbeats, ritmos de jazz y un lirismo digno de un genuino riot, que fascinó a todo aquel que escuchó el primer volumen de Jazzmatazz, que se lanzó en la primavera de 1993. Fue un éxito comercial inmediato, con esto, Guru se convirtió en el progenitor de un sonido nuevo e innovador, que unió a los amantes de la música más allá de sus edades, razas o preferencias artísticas.
A mediados de los ’90, Guru había experimentado por el mundo de la música con empuje y determinación. En 1994, Hard to Earn, el cuarto álbum de estudio de Gang Starr, se aseguró un lugar entre los mejores discos del año y, sin ninguna duda, de la historia del rap. Poco después del lanzamiento de Hard to Earn, Guru se transformó en un creciente magnate discográfico, descubriendo nuevos talentos como la femcee de Philadelphia, Bahamadia, el trío de Queens, Stikken Moov o el dúo del Bronx, Operation Ratification (a.k.a. NYG’z); así formo su propio sello, Ill Kid Records, cuyos trabajos eran distribuidos por Payday Records, afiliado de Polygram. En 1995 Guru y DJ Premier se tomaron un pequeño descanso y Guru aprovechó para supervisar los dos nuevos trabajos que estaban por caer: el Jazzmatazz Vol. 2: The New Reality y la compilación Guru Presents Ill Kid Records. El final de década no fue nada agradable para Guru, fue arrestado en 1996 por la policía del La Guardia Airport en New York, le encontraron una pistola del calibre .308 cargada en su maleta y para rematar, en 1999, fue atracado a punta de pistola saliendo del estudio de grabación en Queens y le robaron dinero y joyas. Pero la música, esa sirena que había guiado a Guru en sus momentos más difíciles, reapareció en el cambio de siglo para bendecirlo una vez más. Moment of Truth (1998) fue todo un éxito, al igual que Full Clip, un doble compacto con treinta temas que aunaban los mejores éxitos de Gang Starr.
http://www.youtube.com/watch?v=U76Nde6rMTw
Los últimos diez años de la vida de Keith Elam estuvieron llenos de acontecimientos, muchos momentos de euforia, su imprevisto final y definitivamente la muerte de una leyenda. En el 2000, Keith Elam se convirtió en padre, su hijo Keith Elam Casim llegó al mundo en julio. Ese mismo año, Guru lanzó Jazzmatazz Vol. 3: Streetsoul, la tercera entrega de la saga Jazzmatazz, y recibió el tributo y la condecoración de su ciudad natal, por su labor con los más pequeños, la calidad y el valor de su música y el camino que allanó para otros tantos artistas de Boston. En 2003, después de una pausa que duró más de cinco años, Guru y Premo volvieron a encontrarse para trabajar y lanzar The Ownerz, sexto y último álbum de estudio de Gang Starr, debido a diferencias personales entre ambos. Aunque Premo afirmara que se trataba de otro parón, Guru sugirió lo contrario, declarando que él ya no estaba involucrado con Gang Starr ni con el consorcio de artistas afiliados Gang Starr Foundation. Después de desvincularse por completo de Premier y Gang Starr, Guru seguía moviéndose con la misma determinación que tuvo en sus primeros años en New York. Fundó 7 Grand Records y fue alternando entre álbumes en solitario y nuevos Jazzmatazz desde 2005 a 2009. En la primavera del ’09, mientras su último álbum, Guru 8.0: Lost and Found, salía del horno, se le fue diagnosticado un extraño cáncer que afectaba a los glóbulos blancos. Guru, que había luchado en mil y una batallas desde que era niño, ahora afrontaba la más difícil de todas, le tocaba luchar por su vida. En 2010 Guru sufrió un paro cardíaco y cayó en coma poco tiempo después, estado en el que permaneció los dos meses posteriores, hasta el 19 de Abril. Guru sucumbió en su última batalla a los 48 años de edad.
Recordemos a Guru.
En el año 2010, la vida de Keith Elam terminó en tragedia, pero durante su estancia en este mundo, solo fue interrumpido por el triunfo. El renegado de Roxbury, criado en un clan leal basado en la disciplina y la educación, había absorbido las lecciones de su familia y las utilizó para labrarse su propia leyenda, dejando una marca indeleble en este universo que todos compartimos. Keith se reinventó como Guru, y por su talento y su fuerza de voluntad, conquistó el rap y el jazz, construyó un puente entre estas dos formas de arte, convirtiéndose en un icono en ambos géneros. Durante los meses después de su fallecimiento, internet se llenó de páginas, foros y mensajes rindiendo tributo al de Boston, incluso su familia creó un sitio WEB en su memoria. Los grafiteros de medio mundo sabían del papel que Guru jugó en la comunidad Hip Hop, pronto surgirian numerosos murales en su honor, uno de ellos ubicado en el centro neurálgico del rap, el Bronx. En Febrero de 2011, varios de los contemporáneos de Guru, incluyendo entre otros a R.A. the Rugged Man, Canibus o el miembro afiliado a la Gang Starr Foundation, Jeru the Damaja, participaron en el concierto honorífico celebrado en Toronto, Canadá, que homenajeó tanto a Guru como a uno de sus primeros amores, el verdadero Hip Hop.
Los que le siguieron en sus inicios, lo recordarán, sin duda, por sus dotes musicales, incluyendo su contenido lírico. Desde su muerte, tanto miembros de su familia como compañeros de profesión han compartido sus recuerdos, incluyendo a Harry Elam Jr., quién escribió una conmovedora elegía titulada «My brother, Gang Starr’s Guru» para el Boston Globe cuatro días después de su muerte o el legendario rapero de Houston, Scarface, que en Mayo de 2010 relató con cariño los grandes momentos vividos junto a su, a veces irascible, amigo. DJ Premier, hermano musical de Guru durante casi veinte años, recordó de forma conmovedora a su gemelo musical poco después de su fallecimiento. Y Jazzmatazz, el proyecto diseñado por Guru que combinaba rap y jazz, le hizo una reverencia a su creador a principios de 2011, a través de un concierto llamado Legacy Jazzmatazz, organizado en New York para rememorar a Guru y a su monumental concepto.
Por último, mucho de los fans de Guru tienen pensamientos especiales que se le vienen a la mente cuando se le recuerda: los temas favoritos de Gang Starr, los cortes de la serie Jazzmatazz o los increíbles y divertidos directos que ofrecía en sus giras. Para un servidor, el primer pensamiento que se le viene a la mente es aquella aparición en la primavera de 1991, poco después de lanzar Step in the Arena, en Party Machine, de Nia Peeples; un late-show televisivo de danza que se emitía los viernes en los EE.UU. Guru y Premier interpretaron «Who’s Gonna Take The Weight», el último single de Step in the Arena. Con dos platos un mezclador y un microfóno crearon una discoteca improvisada aquel día. Aquella noche Guru liberó su señorío lírico, vestido con una gorra de béisbol, gafas de sol y una camiseta de los Boston Bruins, sosteniendo con una mano el micrófono y con la otra a un público entregado. Para mí ese momento encapsula a Keith Elam: un hijo pródigo de Boston que en su camino, un camino poco transitado, encontró la inmortalidad.
Un recuento por mis temas favoritos de este con Premier y en solitario:
http://www.youtube.com/watch?v=lH3hrtp1T84
Descanse en paz Keith «Guru» Elam. 17-07-1961 / 19-04-2010
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